En esta sección te contamos un poco sobre las dos razas que forman parte de nuestra pequeña familia gatuna. Conocerlas bien es el primer paso para entender por qué nos enamoramos de ellas y por qué elegimos criarlas con tanto cariño.

British Shorthair

El British Shorthair es conocido por su carácter calmado y su robustez. Es un gato tranquilo, equilibrado y muy afectuoso, ideal para hogares familiares. Sus ojos grandes y redondos, su pelaje corto y denso, y su cuerpo musculoso le dan un aspecto majestuoso y adorable.

Carácter: Amigable, independiente, pero cariñoso con sus humanos. No es un gato de mucha actividad, sino más bien de carácter sereno.

Cuidados: Necesitan cepillado regular debido a su pelaje denso, pero su cuidado es relativamente sencillo.

Scottish Fold

El Scottish Fold es fácilmente reconocible por sus características orejas dobladas hacia adelante. Además de su apariencia única, son gatos dulces y tranquilos, con una personalidad amigable y juguetona.

Carácter: Muy sociables y afectuosos, les encanta la compañía humana y son perfectos para hogares tranquilos. Son conocidos por su temperamento amable y su naturaleza curiosa.

Cuidados: Al igual que el British Shorthair, su pelaje no requiere demasiados cuidados, pero es importante asegurarse de que sus orejas estén siempre limpias y saludables.